martes, 16 de septiembre de 2025

22. REBECA: UNA ESPOSA PARA ISAAC


Buenos días queridos chicos, me alegra verlos y compartir con ustedes hoy.


Nuestra lección bíblica de hoy es muy bella y nos invita a poner en manos de Dios todas nuestras decisiones.

Hablaremos acerca de Rebeca, la esposa de Isaac.

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Leemos atentamente el capítulo 24 del libro del Génesis 

📖 Génesis 24 – Biblia de Jerusalén

El matrimonio de Isaac

  1. Abraham era ya viejo, de edad avanzada, y Yahveh había bendecido a Abraham en todo.

  2. Abraham dijo a su siervo, el más antiguo de su casa, que gobernaba todos sus bienes: «Pon tu mano bajo mi muslo,

  3. y júrame por Yahveh, Dios del cielo y Dios de la tierra, que no tomarás mujer para mi hijo de entre las hijas de los cananeos en medio de los cuales habito,

  4. sino que irás a mi tierra natal y tomarás mujer para mi hijo Isaac.»

  5. El siervo le respondió: «Tal vez la mujer no quiera seguirme a esta tierra. ¿Debo entonces llevar a tu hijo a la tierra de donde saliste?»

  6. Abraham le dijo: «Guárdate de llevar allá a mi hijo.

  7. Yahveh, Dios del cielo, que me sacó de la casa de mi padre y de mi tierra natal, que me habló y me juró: “A tu descendencia daré esta tierra”, él enviará su ángel delante de ti y tomarás de allí mujer para mi hijo.

  8. Y si la mujer no quiere seguirte, quedarás libre de este juramento. Pero a mi hijo no lo lleves allá.»

  9. El siervo puso su mano bajo el muslo de Abraham, su señor, y le juró lo que le había mandado.

  10. El siervo tomó diez camellos de entre los de su señor y partió, llevando consigo toda clase de riquezas de su señor. Se puso en camino hacia Aram Naharayim, hacia la ciudad de Najor.

  11. Hizo arrodillar los camellos fuera de la ciudad, junto al pozo de agua, a la hora de la tarde, a la hora en que las mujeres salen a sacar agua.

  12. Y dijo: «Yahveh, Dios de mi señor Abraham, dame, te ruego, éxito hoy y muestra tu bondad hacia mi señor Abraham.

  13. Aquí estoy yo junto a la fuente de agua, y las hijas de los hombres de la ciudad salen a sacar agua.

  14. Sea, pues, la joven a quien yo diga: “Inclina, por favor, tu cántaro para que yo beba”, y ella responda: “Bebe, y daré de beber a tus camellos también”, sea ella la que has destinado para tu siervo Isaac. Con ello conoceré que has mostrado tu bondad hacia mi señor.»

  15. Apenas había acabado de hablar, cuando salió Rebeca, que había nacido a Betuel, hijo de Milcá, mujer de Najor, hermano de Abraham, con su cántaro sobre el hombro.

  16. La joven era muy hermosa, virgen, a la que ningún hombre había conocido. Bajó a la fuente, llenó su cántaro y subió.

  17. Corrió el siervo a su encuentro y dijo: «Dame, por favor, de beber un poco de agua de tu cántaro.»

  18. Ella respondió: «Bebe, señor mío.» Se dio prisa y bajó el cántaro sobre su mano y le dio de beber.

  19. Cuando acabó de darle de beber, dijo: «También sacaré para tus camellos hasta que acaben de beber.»

  20. Se dio prisa, vació su cántaro en el abrevadero, corrió otra vez al pozo para sacar y sacó para todos sus camellos.

  21. El hombre la miraba en silencio, preguntándose si Yahveh había dado éxito o no a su viaje.

  22. Cuando los camellos acabaron de beber, el hombre tomó un anillo de oro, de medio siclo de peso, y dos brazaletes de oro para sus brazos, de diez siclos de peso,

  23. y le dijo: «¿De quién eres hija? Dímelo, por favor. ¿Hay en casa de tu padre lugar para hospedarnos?»

  24. Ella respondió: «Soy hija de Betuel, hijo de Milcá, que ella dio a Najor.»

  25. Y añadió: «Tenemos paja y forraje en abundancia, y también lugar para hospedarse.»

  26. Entonces el hombre se inclinó y adoró a Yahveh,

  27. y dijo: «Bendito sea Yahveh, Dios de mi señor Abraham, que no apartó su bondad ni su fidelidad de mi señor. Yahveh me ha guiado en el camino a la casa de los hermanos de mi señor.»

  28. La joven corrió y contó todo esto en casa de su madre.

  29. Rebeca tenía un hermano llamado Labán. Labán corrió afuera hacia el hombre, a la fuente.

  30. Al ver el anillo y los brazaletes en las manos de su hermana, y al oír las palabras de su hermana Rebeca, que decía: «Esto me ha dicho aquel hombre», vino a él, que estaba aún junto a los camellos, al lado de la fuente.

  31. Y dijo: «Ven, bendito de Yahveh. ¿Por qué estás fuera? Yo he preparado la casa y lugar para los camellos.»

  32. El hombre entró en la casa, descargaron los camellos, se les dio paja y forraje, y se le trajo agua para lavarse los pies, y los pies de los hombres que venían con él.

  33. Le sirvieron de comer, pero él dijo: «No comeré hasta haber expuesto mi asunto.» Y le dijeron: «Habla.»

  34. Dijo: «Yo soy siervo de Abraham.

  35. Yahveh ha bendecido mucho a mi señor y lo ha engrandecido, le ha dado ovejas y vacas, plata y oro, siervos y siervas, camellos y asnos.

  36. Sara, mujer de mi señor, dio a luz en su vejez un hijo a mi señor, que le ha dado todo cuanto posee.

  37. Mi señor me hizo jurar: “No tomarás mujer para mi hijo de entre las hijas de los cananeos en cuya tierra habito.

  38. Irás a la casa de mi padre y a mi familia y tomarás mujer para mi hijo.”

  39. Yo dije a mi señor: “Quizás la mujer no quiera seguirme.”

  40. Él me respondió: “Yahveh, en cuya presencia he andado, enviará su ángel contigo y dará éxito a tu viaje, y tomarás mujer para mi hijo de mi familia y de la casa de mi padre.

  41. Quedarás libre de mi juramento cuando llegues a mi familia; si no te la dan, quedarás libre de mi juramento.”

  42. Llegué hoy a la fuente y dije: “Yahveh, Dios de mi señor Abraham, si das éxito a mi viaje en que estoy,

  43. aquí me pongo junto a la fuente. Sea la joven que salga a sacar agua y a quien yo diga: Dame de beber, y ella me responda: Bebe tú, y también sacaré para tus camellos, sea ella la mujer que Yahveh ha destinado para el hijo de mi señor.”

  44. Antes que acabara de hablar en mi interior, salió Rebeca con su cántaro al hombro, bajó a la fuente y sacó agua. Yo le dije: Dame de beber, por favor.

  45. Se dio prisa, bajó el cántaro de su hombro y dijo: Bebe, y daré también de beber a tus camellos. Yo bebí, y ella dio también de beber a los camellos.

  46. Yo le pregunté: “¿De quién eres hija?” Ella respondió: “Hija de Betuel, hijo de Najor, que Milcá dio a luz.” Entonces puse el anillo en su nariz y los brazaletes en sus manos.

  47. Me incliné y adoré a Yahveh, bendiciendo a Yahveh, Dios de mi señor Abraham, que me había guiado por camino recto para tomar la hija del hermano de mi señor para su hijo.

  48. Ahora, pues, si queréis mostrar bondad y fidelidad a mi señor, decídmelo; y si no, decídmelo también, para que yo me vuelva a la derecha o a la izquierda.»

  49. Labán y Betuel respondieron: «Del Señor viene esto. No podemos hablarte ni mal ni bien.

  50. Ahí está Rebeca, tómala y vete, y sea mujer del hijo de tu señor, como ha dicho Yahveh.»

  51. Cuando el siervo de Abraham oyó sus palabras, se postró en tierra ante Yahveh.

  52. Sacó objetos de plata y de oro y vestidos, y se los dio a Rebeca. También dio regalos preciosos a su hermano y a su madre.

  53. Comieron y bebieron él y los hombres que venían con él, y pasaron la noche. Al levantarse por la mañana, dijo: «Dejadme volver a mi señor.»

  54. El hermano y la madre dijeron: «Que la joven se quede con nosotros algunos días, al menos diez, y después se irá.»

  55. Pero él les respondió: «No me detengáis, pues Yahveh ha dado éxito a mi viaje. Dejadme ir a mi señor.»

  56. Dijeron: «Llamemos a la joven y preguntémosle.»

  57. Llamaron a Rebeca y le dijeron: «¿Quieres ir con este hombre?» Ella respondió: «Sí.»

  58. Entonces enviaron a su hermana Rebeca con su nodriza, con el siervo de Abraham y sus hombres.

  59. Bendijeron a Rebeca y le dijeron:
    «¡Oh hermana nuestra,
    sé madre de millares de miríadas,
    y posea tu descendencia la puerta de sus enemigos!»

  60. Rebeca se levantó con sus doncellas, montaron en los camellos y siguieron al hombre. El siervo tomó a Rebeca y se fue.

  61. Isaac venía del pozo de Lajay Roí, pues habitaba en la tierra del Négueb.

  62. Había salido Isaac a meditar en el campo al caer la tarde, y alzando los ojos vio que venían unos camellos.

  63. Rebeca alzó los ojos, y viendo a Isaac, bajó del camello,

  64. y dijo al siervo: «¿Quién es ese hombre que viene por el campo a nuestro encuentro?» El siervo respondió: «Es mi señor.» Ella tomó el velo y se cubrió.

  65. El siervo contó a Isaac todo lo que había hecho.

  66. Isaac introdujo a Rebeca en la tienda de Sara, su madre, la tomó por mujer y la amó. E Isaac se consoló de la muerte de su madre.

Gracias por tu atención, aprecio mucho tu participación en clase.

👼 Bendiciones. 👼